Las imágenes de niñas, cargadas de apelaciones sexuales, que utilizan habitualmente los medios, son perjudiciales para su salud emocional y física, según un nuevo informe de la Asociación de Psicólogos Americanos. El informe, publicado el lunes pasado, analiza 300 casos ocurridos durante los últimos 18 meses, que fueron extraídos de de los medios masivos (desde programas de televisión, películas y letras de canciones, hasta publicidades que muestran muñecas semi desnudas destinadas a pre-adolecentes,), donde se exhiben niñas posando sugestivamente e imitando actitudes sexuales de modelos y celebridades.
Los investigadores piensan que dichas imágenes pueden inducir a las niñas a pensarse a ellas mismas (y a sus propios cuerpos) como objetos sexuales. “Las imágenes sexuales son un tema preocupante para la salud mental de las niñas" afirmó Tomi-Ana Roberts, profesor de psicología en la universidad de Colorado (USA). Los estudios han reflejado problemas relacionados con desórdenes en la alimentación, autoestima baja y depresión. Roberts agregó que en ninguna parte del informe se detalla cómo estos problemas se relacionen directamente con las "imágenes sexualizadas" que se reproducen en publicidades y medios de comunicación.
Los investigadores definieron la "sexualización" como un hecho que ocurre cuando los valores de una persona están directamente relacionados con su atracción y conducta sexual, dejando de lado otras características personales, y también cuando las persona es sexualmente "objetizada" (por ejemplo, convertida en un objeto para uso sexual).
El informe cita particularmente a las muñecas Bratz por “sexualizar" la indumentaria (minfaldas, medias y accesorios con plumas). “Aunque estas muñecas no están más sexualizadas que las muchachas o mujeres que se ven en los videos de MTV, es preocupante cuando las muñecas están diseñadas específicamente para un grupo objetivo de niñas de 4 a 8 años de edad y sus imágenes están asociadas a objetos sexuales del mundo de los adultos,” señala el informe.
Isaac Larian, CEO de MGA (fabricante de las muñecas Bratz, con base en la California), dijo que él discrepa con el el informe de los psicólogos sobre las muñecas. "La compañía ha vendido más de 125 millones de muñecas en todo el mundo durante los últimos siete años. La indumentaria de las muñecas es igual a la ropa que utilizan las niñas en todas las escuelas de los E.E.U.U.,” Larian, padre de tres niñas, indicó “No son muñecas atractivas o sexys, las muñecas Bratz son muñecas plásticas caricaturales, no parecen seres humanos verdaderos. .”
El informe también observa otros planes del fabricante para lanzar una línea de las muñecas con la imagen de las Pussycat Dolls (una banda musical femenina conocida por sus atractivos trajes y por sus letras sexuales). Ana Pellegrini, profesora asociada de la universidad de Nueva York, que además escribe sobre políticas sexuales y niñez norteamericana, está preocupada por el tema que ella denomina “su pánico sobre la sexualization de niños".
“No voy a negar la existencia de un marketing agresivo para el mercado de niños y pre-adolescentes, pero hay una profunda moralización alrededor de él,” dijp. “Pienso que son muchas las niñas y muchachas que ya estás objectizadas cuando llegan al sexo; y que hay algunas cosas que se ven como "objetización" son experimentadas por las niñas como una forma de poder".
"Alguien de una generación anterior puede ver la moda de los adolescentes de hoy como demasiado reveladora, pero el adolescente puede no sentirse orgulloso de su cuerpo objetizado" . La Sra Pellegrini impulsa a los padres, al personal docente y a los profesionales de la salud a cuestionar la sexualización de las imágenes de niñas en contextos que no son sexuales.
Texto original publicado en Usa Today
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